Prof. Maria Luisa Fernández Rivera. Doctora en
Bellas Artes. Profesora de la Universidad del Pais Vasco UPV/EHU
AUTORA de El Acceso a un Mundo Virtual
Cada cultura, cada época ha hecho un dibujo distinto de ese mundo en el que se ha desarrollado su experiencia, y cada dibujo, cada representación ha dado lugar a una interpretación sobre la realidad.
AUTORA de El Acceso a un Mundo Virtual
Cada cultura, cada época ha hecho un dibujo distinto de ese mundo en el que se ha desarrollado su experiencia, y cada dibujo, cada representación ha dado lugar a una interpretación sobre la realidad.
Esta idea de realidad ha variado mucho hasta llegar
al concepto actual, pero lo que para nosotros es la realidad no es mas que la
representación o representaciones que nos hacemos de ella. La experiencia del
exterior es un conjunto de percepciones que nos llegan a través de los sentidos
y que nosotros interpretamos subjetivamente aunque los datos de que partimos
sean más o menos objetivos. Nuestra visión del mundo se configura de manera
simbólica, interactuando aspectos racionales y ordenados junto a otros caóticos
e instintivos.
Ni en el conocimiento ni en la realidad hay nada
propiamente objetivo ni nada propiamente subjetivo: los llamados objeto y
sujeto son aspectos de una sola realidad. Esta no es más que la representación
que nos hacemos de ella. El hecho de que para nosotros una cosa sea y siga siendo
justamente esa cosa se desprende fundamentalmente del hecho de que fijemos su
"posición" dentro de la totalidad del espacio intuitivo.
Conocer es orientarnos
teóricamente en la realidad, es hacer un dibujo de ella. Como toda orientación
humana, sucede según un sistema cultural de normas, preceptos y significaciones
cuya apropiación personal decidirá cómo será ese dibujo, esa teorización
nuestra, esa visión interpretativa sobre lo que el mundo es para nosotros. Esos
esquemas de valor relativamente integrados desde los cuales ordenamos nuestra
experiencia, son consecuencia del proceso de apropiación en que consiste la
historia personal.